Anticipan una compilación sobre la historia de los sectores populares en Bariloche
¿Cómo se acuñó el concepto de vecino en El Frutillar? ¿Qué similitudes tuvo la erradicación forzosa de barrios en los 70 con la edificación de 34 Hectáreas? ¿Por qué el Alto se piensa en forma separada del Centro? Son sólo algunos de los interrogantes que se abordarán en un libro de inminente aparición.
Por Adrián Moyano
Si las cosas se dan como sus impulsores calculan, en mayo aparecerá un libro con varios trabajos que piensan a Bariloche desde las ciencias sociales. Anticipó el lanzamiento la historiadora Paula Núñez, quien precisó que como denominador común, los textos girarán en torno al pasado reciente de los sectores populares. Además de la investigadora, participarán del futuro volumen su compañero de estudios Daniel Fuentes (foto), la antropóloga Laura Kropf y el también historiador Alejandro Agüero, entre otros.
Según precisó la estudiosa, “la idea que nos convoca a trabajar y nos acercó en el trabajo con Daniel, es reflexionar sobre la ciudad, sobre esta tremenda heterogeneidad que es Bariloche. Tuvimos el privilegio de consultar el archivo del Club Andino pero también mucha gente nos acercó sus memorias personales. Eso es muy lindo, al igual que juntarnos con otro grupo de profesionales de las ciencias sociales, muy interesantes y muy comprometidos con una idea: las ciencias sociales no son solamente para hacer un lindo relato sino también para ver de qué manera se puede pensar un cambio en esta ciudad”.
“En ese marco, pensamos una iniciativa que a nosotros nos gusta mucho y esperamos compartir pronto: la compilación de una serie de trabajos que apunta a reflexionar sobre la memoria y la identidad en los sectores populares. Esta es una ciudad que históricamente se ha percibido escindida en dos espacios pero que de hecho, funciona junta. Entonces, ¿qué pasa con todo ese ruido? Hay trabajos muy interesantes sobre cómo se incorpora la violencia, cuáles son las redes de diferencia, cómo se crea la categoría de vecino”, entre otros, introdujo Paula, que recientemente presentó un libro conjunto sobre la historia del Club Andino Bariloche.
La inminente publicación aportará varias miradas. “Hay un trabajo muy lindo que llevó adelante Laura Kropf sobre El Frutillar, en el marco de su licenciatura en Antropología. También un estudio de Alejandro Agüero sobre Virgen Misionera y bueno, otros trabajos sobre otros ámbitos, que llevamos adelante con Daniel. Sobre todo, la reflexión sobre qué significa esta ciudad, qué procesos ha llevado adelante la historia de la ciudad para tener hoy por hoy, esta fragmentación como problema, qué significa esto de tomar a la memoria como una de las fuentes de la historia... Estamos en eso también”.
Para empezar a pensar
No creemos que un libro de estas características tenga antecedentes. “Es una edición de textos que reflexionan sobre el tema central de los sectores populares. Cada uno con una línea de análisis. Más que opuestas, son formas de ver que por ahí, son piolas para empezar a pensar. Estamos tratando de hacer un texto muy didáctico porque de hecho, la idea es que pueda llegar a cada una de las escuelas como para que los docentes se encuentren, no sólo con la reflexión sobre los sectores populares, sino también con formas distintas de ver la ciudad, escritas de una manera que sea accesible y se pueda multiplicar”, adelantó la historiadora.
Al ángulo de Núñez y Fuentes ya se lo conoce en Bariloche, pero cabe prestar atención una vez más. “Personalmente, yo me detuve en las formas con que se ha analizado la historia de Bariloche, cómo ha sido la apropiación del espacio a lo largo de los años, cuáles fueron los hitos de ruptura, cuáles las similitudes y las diferencias... Por ejemplo, entre lo que fue la movilización a fines de los 70 de los barrios que estaban sobre el Nahuel Huapi hacia toda la zona de Arrayanes y Mutisias, y lo que fue la edificación de 34 Hectáreas. En los primeros casos, la topadora vino y sacó gente... Similitudes y diferencias en ese tipo de procesos, que fueron tan de ruptura... Procuramos también tratar de reconocer estas pequeñas movilizaciones en el espacio. Por ejemplo, hay un problema que teníamos en la cabeza: hay una gran crítica sobre la falta de participación y compromiso de los sectores populares, pero si ves que son personas que permanentemente sufrieron desarraigo, ¿qué compromiso se puede pedir? Por lo menos, habría que tomar estas situaciones en cuenta a la hora de decir: che, ahora comprométanse porque resulta que tenemos un proyecto de ciudad... ¿Qué ciudad? Si de golpe nos arrancan... Bueno, buscábamos llamar la atención sobre ese tipo de cosas”.
Afortunadamente, la iniciativa está a punto de concretarse. “Este proyecto está en la etapa de juntar fondos, pero prácticamente ya los tenemos. La economía siempre es un problema, pero ya casi están. Creemos que los vamos a poder presentar en mayo, somos súper optimistas... Está avanzado, por eso me animo a hablar”, bromeó Paula. Fue un esfuerzo muy grande de mucha gente y bueno, estamos muy contentos de tenerlo prácticamente plasmado. Así que haremos un gran aviso cuando salga, porque nosotros pensamos, al igual que muchos, que tiene que servir para algo esto de sentarse y hacer historia”. Claro que sí.